Todo y que me pareció una película muy previsible si por algo impactó la
película Avatar es por la crítica hacia el modo de vivir actual de la
humanidad. La pérdida de conexión cada día más acentuada con la madre
naturaleza, de la que somos hijos, nos aleja cada vez más de ella.
La película del 2009 como tantas otras críticas veladas hacia el rumbo que
la humanidad está tomando, no ha conseguido el efecto deseado de cambio. Es
probable que tampoco lo pretendería, as fuerzas a vencer son enormes, sin
embargo, son muchos los granos que han
ido depositándose en esa dirección pero a nuestro pesar pocos efectos surten y
la deriva de nuestra historia sigue sin un rumbo claro. Los poderes económicos,
políticos, religiosos, nacionales de unas élites no dejaran escapar el botín
que representa la depredación de los "recursos naturales".
La cola que permite a los seres de Pandora es el reflejo de esa conexión
que los humanos hemos perdido, la vida y amor hacia los árboles refleja la
velocidad de desertización de nuestra Tierra con la desaparición de masas
forestales a un ritmo frenético. Esto es sabido desde antiguo, la expulsión del
paraíso no significa nada más que el alejamiento del mundo natural. Podría
seguir con pequeñas pinceladas de la película que nos deberían hacer
reflexionar y cambiar nuestro modo actual de vida.
Sin embargo, nada está más lejos de la realidad, el cambio está lejos de
producirse . Y si, como todo el mundo dice, la economía empieza a recuperarse
las dudas más que razonables de un cambio serán enterradas por un nuevo y breve
periodo de bonanza. Mientras tanto los dogmatismos, la pobreza y las enfermedades
irán avanzando
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