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domingo, 8 de febrero de 2015

FERROCARRIL, AUTOMÓVIL Y PUEBLO


Las inversiones en nuevas infraestructuras en ferrocarriles han sido impresionantes en nuestro territorio. Quizás la pregunta esperada es ¿,tocaba?, sin embargo en este post me voy a centrar en lo que tuvimos, en lo que tenemos y lo que quisiéramos tener.

Mucho se habla en nuestros días del déficit en inversión ferroviaria para los servicios de cercanías y regionales, y cierto es. Así la respuesta a la gran pregunta la tiene la política con su café para todos... pero a pesar de todo el pueblo se dejó arrastrar…

A partir de los últimos años de la década de 1950 el gobierno de Franco y la sociedad en su conjunto apostó de forma clara por el nuevo transporte privado, el automóvil. Es el progreso!.

Autopistas, autovías, carreteras, hicieron su aparición por doquier en detrimento de una reforma integral de una red ferroviaria que padeció una conflicto y de la que le costó recuperarse. Muchos trazados ya tuvieron que cerrar por los destrozos causados por la guerra civil. Una mayoría recuperados quedaron en precarias condiciones, así pues en los años 40 y 50 a la población no le quedó más remedio que recurrir a un medio de transporte como el ferrocarril, prisionero de la falta de inversiones y con el consiguiente mal servicio, en cuanto a duración, comodidad y precio del trayecto. Estaba sembrada la semilla del rechazo al ferrocarril.

El gobierno de la época realizó ingentes inversiones.  Los trazados automovilísticos llevaban de la mano el nacimiento, crecimiento e implantación de empresas del sector automovilístico era la apuesta, Peugot en Madrid 1952,  SEAT en Barcelona en 1953, Mercedes-Benz en Álava en 1954 Renault en Valladolid Renault en 1953, Citroën en Vigo en 1958..

Será casualidad o causalidad…decidan ustedes, pero lo cierto es que hay una realidad  encadenada de hecho. En números redondos, años 50 auge empresas automovilísticas, años 60 auge del automóvil, camión  y construcción de autopistas, años 70 desaparición de los últimos trazados ferroviarios.

La realidad es tozuda y  coincidente en una realidad, el período más negro en cuanto a clausuras de vías ferroviarias en nuestro país lo vivieron en mayor medida las líneas con un carácter marcadamente secundario.

Sólo centrándome en Cataluña se procedió al cierre de las siguientes líneas, Tranvía de Tiana- Montgat 1955, Palamós- Girona 1956, Tranvía de Mataró 1965, Tortosa- La Cava 1968, Olot-Girona y Sant Feliu de Guíxols-Girona  1969, Tranvías de Barcelona 1970, Manresa-Guardiola 1973, Tortosa -La Puebla de Híjar 1973, Reus - Salou 1975. Una auténtica carnicería en 20 años en lo que a vía estrecha se refiere.

La población finalmente reaccionó, dos generaciones tuvieron que pasar y en los años 80 las amenazas de cierre de líneas como el Igualada-Martorell, o Lleida-La Pobla de Segur no se materializaron.

Pero de nuevo, nuestros grandes gobernantes tenían en marcha un plan el AVE. Así para los años 90 nos regalaron una auténtica insensatez como ya se ha demostrado con trenes parados y cierre de líneas, pero aún así seguimos invirtiendo para vertebrar España...

Por suerte los gobiernos locales si hicieron una pequeña apuesta y fructífera de los ferrocarriles secundarios como ha demostrado FGC y para el nuevo milenio otros gobiernos locales siguieron la política de recuperación de los pequeños trazados locales de vía estrecha, el Trenet en Valencia, Serveis Ferroviaris de Mallorca con la reapertura de líneas y la mejora del Palma- Inca, entre muchos otros.

De la mano de los atascos, donde un trazado ferroviario sería deficitario, llegó la apuesta del tranvía. En menos de dos generaciones la población volvía a ver con buenos ojos este desdichado medio de transporte…y es que la verdad los ciudadanos somos fácilmente manipulables. Por suerte parece que cada vez lo somos menos, sin embargo queda tanto camino por recorrer, veremos en los próximo años de lo que somos de hacer.

El rechazo al ferrocarril en las comarcas que se perdió se ha pagado caro. Hoy en Girona, quien tuviera los cercanías que se cerraron! y en el Berguedà? y en Reus? y Salou?...
Los atascos se multiplican, pero seguimos sin apostar por las existentes, sin reabrir  las cerradas y aún menos se piensa en crear esas líneas necesarias para lograr una mejor calidad de vida que en su día el pueblo perdió inducido por un progreso que se ha demostrado erróneo.

Dejo este enlace a modo de reflexión:
http://www.transportpublic.org/revista-mss/1242-hagamos-memoria-fgc-ha-transformado-un-carrilet-condenado-a-muerte-por-el-estado-en-uno-de-los-mejores-trenes-suburbanos-de-europa

 Y una canción para el recuerdo:
En recuerdo a aquellos carrilets

Y un magnífico video donde vemos la vitalidad de una máquina centenaria

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