Sobre la estancia llamada Cocina
Hará unos 15 años tuve el
placer de conocer a una señora de unos 70 y largos años, viuda de hace años, era
la vecina del rellano en la escalera donde entonces vivía. No recuerdo muy bien
como fuimos a parar a la conversación de la cocina, pero recuerdo que pude
entrar a ver su cocina de la que tan satisfecha estaba y tanto me había
hablado.
Al verla quedé fascinado
por la sencillez de la cocina, tenía su cocina de fuego a gas natural, su mármol, pero no tenía armarios.
Las estanterías estaban cubiertas con cortinas de cuadros rojos y blancos, los
útiles importantes colgados en la pared embaldosada.
La estancia tenía un
gusto a tradición, sobriedad y sencillez, me hizo recordar la cocina de la casa
de los abuelos y padres de mi padre, la casa familiar, una casa del año 1920 que cuando yo era pequeño tampoco tenía
puertas y tenía cortinas a cuadros verde y blanco que cubrían los estantes
bajeros.
Por supuesto que en las
dos casas que viví con mis padres las cocinas tenían sus armarios arriba y
abajo.
Y pensaréis y todo esto a
que vine?..., sencillo, el de hoy es un post sencillo pero con un fondo que quizás
puede hacernos replantear una pequeña parte de la forma en la que vivimos y reflexionar en este caso si
necesitamos los armarios de la cocina o nos da más quebraderos de cabeza. Varios
factores juegan a favor de las cortinas, y hacen que me decante
por el modelo cortina en la cocina:
Cubren los ollas o útiles
que hay detrás, mismo objetivo que las puertas de los armarios.
Dan sensación de calidez, recordemos que en las cocinas discurría buena parte de la vida en las casas
Son más cómodos de lavar, y más hoy en día con la
lavadora.
Su rotura es mucho más
fácil de sustituir
Precio y Mantenimiento más
económico. Bisagras que se rompen, puertas que no cierran bien..
Te ahorras golpes con las
puertas, caso que te las dejes abiertas.
Ante estas
virtudes, he pensado en las de los armarios y os digo que no veo más que una
estética y de moda salvo que quizás, y quiero recalcar quizás, puedan evitar
que se ensucien algo menos las estanterías, pero…todos sabemos que tarde o
temprano se han de limpiar y tanto da entonces cortinas como puertas.
Personalmente creo que aún es peor si hay puertas pues tienes más superficie a
limpiar y más complicado.
Si voy un poco más allá
se me ocurre que quizás se han impuesto los armarios porque es evidente que a
más madera más cara la cocina y ya sabemos en este mundo de hoy somos especialistas
en crear necesidades allí donde no las hay y sacar más tajada.
No quisiera ser un nostálgico y pensar que todo lo de antes era mejor, pero es evidente que debemos conservar aquello que es válido porque ahorra faena por poner ejemplo, o porque es más económico, que también. Mi propuesta es combinar con solvencia modernidad y antigüedad, una nevera y una cocina de gas seria imprescindible y un lavavajillas una interesante ayuda como electrodomésticos grandes básicos. A partir de ahí, tostadora, picadora, sandwichera...
Parad y pensad en las casas de
vuestros abuelos, como eran, también tenían armarios para guardar la ropa, pero
en la cocina que había, cortinas, por algo será no?, como frase final me remito
a lo dicho, no entiendo porque nos complicamos la vida.
Somos especialistas en
crear necesidades de donde no las hay.
Dejo algún link para la reflexión, las fotografías hablan por sí solas.
http://www.imanita.com/cortinas-cocina-rustica.html
http://www.imanita.com/cortinas-cocina-rustica.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario